La policía surcoreana impidió el sábado que activistas lanzaran panfletos contra el régimen de Corea del Norte, amparándose en un histórico acuerdo entre las dos Coreas durante una cumbre el mes pasado.
El líder norcoreano Kim Jong Un y el presidente surcoreano Moon Jae-in acordaron restaurar la paz, abogar por la reconciliación y cesar actos hostiles, tras reunirse en la localidad de Panmunjom el 27 de abril pasado.
"Actos hostiles" incluye cesar de emitir mensajes de propaganda a través de los altavoces situados en la frontera entre las dos Coreas, o enviar panfletos políticos de un lado al otro.
Las dos Coreas retiraron en consecuencia sus altavoces de la zona fronteriza.
Además, unos 300 policías fueron desplegados a un parque cercano a la frontera donde un grupo de una veintena de activistas --entre ellos desertores norcoreanos-- intentaban enviar por aire esos panfletos mediante globos.
La policía separó a este grupo de otro, de unas 40 personas, que los acusaba de generar tensiones con el Norte. "Basta de provocaciones guerreras", les gritaron.
La policía impidió que el grupo de activistas anti-Pyongyang enviara unos 5.000 panfletos de propaganda al Norte.